Algun día.

Cada mañana despierto con esa sensación de asco por que tu recuerdo invade mi mente. 

Como puedo borrar esas caricias que más que dar placer provocan náuseas. 

No poder dormir por que cada día el mismo sueño se repite como una película grabada sin un final feliz. 

Esa sensación que provoca crisis existenciales cada puto mes del año, recordar ese tacto que quema mi piel y esas ganas inmensas de limpiar la suciedad. 

Recordar ese dolor de como invaden mi cuerpo con un pedazo de carne que no es bienvenido y no poder defenderte por sentir una ola de miedo y pánico. 

Oler tu puto aroma que por naturaleza tienes y que en vez de recordar algo agradable, mi cuerpo empieza a temblar y ponerse a la defensiva. 

¿Como se supone que una persona puede vivir con eso? 

Cada sensación de desagradó solo provoca miradas curiosas que se hacen la misma pregunta "¿que le pasó? ".

Como limpiar lo interior, esa parte íntima que el agua y el jabón no pueden tocar. 

Ahora entiendo lo que decía " Nunca podrás olvidar esto".

Pues fueron sensaciónes tan asquerosas que con trabajos puedo controlar, las recuerdo cada noche a las 3:00 de la madrugada. cuando algunos sueñan en que son los Reyes del mundo y otros sueñan con poder comer al día siguiente. Algunos otros sueñan con poder ser aceptados en la sociedad y otros están siendo mimados por sus madre después de haber soñado con el viejo del costal. 

Un día estas sensaciones desaparecerán, dejaré de sentir esto y podré ser normal como cualquier adolescente que su único problema es que no tiene problemas, un día podré caminar sin sentir vergüenza y sin miedo a que alguien me pueda lastimar o peor aún, podré caminar sin lastimar a nadie. 

Un día que pueda olvidar tu lengua lamiendo cada parte de mi piel como si fueras el puto amo, un día en el que vea mis manos y no sienta asquerosidad de solo pensar en lo que fueron obligadas a tocar, el día en el que olvide como empezó todo por un simple juguete de regalo por sacar buenas calificaciónes.

Un juego con el cual distraerte... 

Pues ese día no sólo mataste el tiempo, si no también mataste la parte inocente que tenía. 

Ese día algo cambio en mi, algo murió en cada embestida tuya y algo desapareció con cada caricia, algo que nunca podré recuperar. 

Pues fue la primera cosa valiosa que tuve y la primera que me quitaron. 

Nunca sabré que se siente entregarle tu inocencia a alguien que tu amas, pues a mi me lo quitaron sin ni siquiera preguntarme; como quien le quita un dulce a un bebé, pues el bebé solo llorara pero no podrá hacer nada ya que está tan sacado de onda que lo único que sabe es que le han quitado algo valioso. 

No existe ningún día en el que no piense en lo que pasó y no poder evitar sentir una sensación de asco cuando el recuerdo viene a mi cabeza cuando estoy a mitad de clases o de camino al trabajo. 

Algún día, podré olvidar. 

Algún día podré tener una vida normal. 

Algún día.